sábado, 24 de enero de 2015

OCASO

La sombra de la montaña impregna mi cuerpo,
el improperio de tus labios rojos mi alma mancilla,
la luz que emiten tus ojos me ciega, no veo
y prostituyo mi vida por un beso en las mejillas.

Pronto llega el ocaso, pronto me tornaré yermo,
pronto brotan de la noche luciérnagas y polillas,
mientras a este desalmado poeta enfermo
solo le consuela el canto de las abubillas.

miércoles, 14 de enero de 2015

LLUVIA

Húmedas tardes que oxidan mis tornillos,
 gotas de tinta que susurran las grises nubes
retransmitiendo en directo la luz de tu cigarrillo,
inundando mi cuerpo con el mar de tus ojos azules.

Cálida infusión de tus labios, suspiros en verso,
estrofas que se pierden entre el denso follaje
bailando al compás que promueven mis dedos,
convirtiendo palabras en cuchillos, miradas en arte.


sábado, 10 de enero de 2015

LA DECADENCIA DE AGAPE (ἀγάπη)

Efímera mirada que en tus ojos se pierde
bajo cálidas lluvias que anhelaron tu Philia,
carnosos labios, la desdicha de mi suerte,
apremiando el final de esta temida valquiria.

Raquítico escalofrío que recorre mi envés,
redefines tu lúcida sonrisa en mi Storge
con dulces caricias que merecen tu tiznada tez,
erigiéndose en la cruz del resplandeciente orbe.

¡Maldito Eros que promueve tu sexo;
este carnal deseo que me nubla el camino!
Quisiera rozar tus caderas en forma de verso, 
y degustar en tus espaldas la cosecha de tu vino.

Xenia que se reinventa y que se arriesga,
lucha contra el opresor con puños y patadas,
las cadenas de esta desalmada tierra,
se deshacen ante el compás de tu tierna mirada.

Ni los rayos de Zeus, padre de todos los dioses,
ni Atenea, ni Artemisa, ni Hefesto, ni Dioniso
impedirán que grabe en mi mente a fuego tu nombre,
jamás sucumbiré ante las tinieblas del olvido.

Ni mi viaje al inframundo, mi ascensión al Olimpo,
ni siquiera la absurda decadencia de Agape
podrá evitar que siga queriendo luchar contigo,
nada callará mi voz cuando chille que te ame...