Miradas anónimas en adoquines empapados,
empapados del suave masaje de la lluvia,
espejos del alma que son nubes entre claros,
cárceles de piel que evitan que el alma fluya.
Escondidos bajo arroyos de agua turbia
perecen nuestras voces en el fango,
corazones que bombean litros de hulla,
abrazos que por miedo nunca damos.
Bajo ese seudónimo de "humanos"
danzamos al son de la angustia,
mientras recuerdo los días de antaño,
echando de menos esa mirada tuya...
empapados del suave masaje de la lluvia,
espejos del alma que son nubes entre claros,
cárceles de piel que evitan que el alma fluya.
Escondidos bajo arroyos de agua turbia
perecen nuestras voces en el fango,
corazones que bombean litros de hulla,
abrazos que por miedo nunca damos.
Bajo ese seudónimo de "humanos"
danzamos al son de la angustia,
mientras recuerdo los días de antaño,
echando de menos esa mirada tuya...
Una nostalgia de esa mirada tan semblante como el alma.
ResponderEliminarEs una pena cómo el ser humano podría repartir amor a los demás pero, en lugar de ello, se deja llevar por el odio y el miedo... Gracias por tu comentario, espero que tengas un gran día ;)
EliminarBajo el seudónimo de "humanos" se hacen muchas cosas y se justifican todavía más, bailar es lo de menos y hacerlo al recordar algo pues es relativamente bueno
ResponderEliminarSaludos, seguiré visitándote :D
El problema es que hay cada vez más "humanos" y menos "personas". Saludos y gracias por tu acertado comentario ;)
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